El últiom miércoles 28 de febrero el alemán se convirtió en el sexto jugador de toda la historia de la NBA en alcanzar 31 mil puntos -y sumando-, ante el Oklahoma City Thunder de Russell Westbrook y Paul George. Por encima de él están varios de los monstruos del básquet mundial: Karl Malone, Kobe Bryant, Michael Jordan, Wilt Chamberlain y, lejos de todos ellos con más de 38 mil puntos, el grandísimo Kareem Abdul-Jabbar.

Su historia comienza en 1994 en el DJK Würzburg con el que alcanzó a subir a la máxima categoría del básquet alemán en 1997-98. Su liderazgo durante esos años despertó el interés del FC Barcelona pero rechazó su oferta ya que quería enfocarse en terminar sus estudios. Luego de su ascenso en Alemania, con 20 años recién cumplidos, probó suerte presentándose al Draft de la NBA de 1998 donde fue elegido en novena posición por Milwaukee Bucks. Pero en la liga de básquet más importante del mundo, se pueden traspasar jugadores entre franquicias y así fue como Don Nelson, en ese entonces entrenador de Dallas Mavericks, llegó a un acuerdo con los Bucks: Robert Traylor por Dirk Nowitzki.

El principio no fue fácil, los Mavericks no aparecían en playoffs desde 1990. Jugando de ala-pívot, Nowtizki se sintió frustrado durante la temporada por su desventaja física y mala defensa en comparación al resto de los jugadores. “Hubo un momento en que tuve la idea de volver a Alemania”, confesó.

Pero su historia comenzó a cambiar en el 99 con la llegada del nuevo y actual dueño Mark Cuban. Cuban tenía un objetivo claro: reestructurar al equipo, familiarizarse y llevar a los Mavs a lo más alto. Así es como se lo podía observar muy comprometido yendo a todos los partidos como un aficionado más. Esto afectó directamente a Dirk quien comenzó a incrementar sus números, sus promedios. Fue seleccionado para el All-Star Game en trece ocaciones. En el del 2006 conquistó el torneo de triples tras superar en la última ronda a Ray Allen y Gilbert Arenas.

En una muy buena temporada con Dallas recibió el MVP (jugador más valioso) en el 2006-07. Nowitzki comenzaba a hacerse fuerte no solo en suelo americano, sino en todo el mundo.

En el 2011 tocó el cielo con las manos. Dallas ganó el anillo ante el principal candidato al título: el Miami Heat de LeBron James y Dwyane Wade.
El 12 de junio, sexto partido de la serie, Nowitzki anotó 21 puntos y fue elegido MVP de esas finales convirtiéndose en el primer jugador europeo en recibir aquel premio.

Durante las siguientes temporadas continuó fiel a su equipo, liderando y ayudando a las nuevas incorporaciones a tomar confianza, siendo para ellos un gran referente. Experto en triples, exhibió un juego único a pesar de su edad.

Es imprescindible mencionar que en el 2017, para ser precisos el 7 de marzo ante Los Angeles Lakers, el alemán alcanzó los 30 mil puntos. Fue un año duro, en donde las lesiones le impidieron que sobresalga en el equipo.

A sus 39 años, el número 41 volvió a hacer historia. “Dirk es mi jugador favorito y mi ejemplo a seguir”, aseguró Salah Mejri, pívot de los Mavericks, al igual que la mayoría de sus compañeros.

En definitiva, Dirk Nowitzki, no para de impresionar a través de los años. Su calidad de juego y efectividad en triples son únicos.
Quizás Dirk no es tan reconocido por aquellos no aficionados al deporte, como si lo es Michael Jordan, pero sin dudas está a la altura de todos aquellos monstruos.

Lucía Pinillos (especial para unocontraunoweb.com)