En una noche de ensueño, con una producción colectiva excelsa, el Rojinegro concretó una celebrada victoria 91-73 ante Lanús, en condición de local, que lo acerca a la resolución de la serie. El Rojinegro de Gualeguaychú domina 2-1 la llave y el sábado se disputará el cuarto round, donde el elenco de Ezequiel Vallet precisará una victoria para continuar con vida en las Semifinales.

En el contexto de un rendimiento superlativo del dueño de casa, que se caracterizó por una tremenda efectividad de tercera dimensión (16/36), Lanús no consiguió imprimir un funcionamiento atildado y siempre corrió de atrás.

En el plano individual sobresalieron las labores de Sebastián Bernasconi con 22 tantos (3/4 en triples y 5/8 en dobles) y Alejandro Madera, que aportó 18 unidades (7/11 de cancha) y 8 rebotes.En tanto que en el rincón perdedor sobresalió Sebastián Chaine con 20 puntos (9/14 de campo) y 5 rebotes

El cotejo inició bajo una órbita de estudio y nerviosismo, por eso Central dominó 5-4, a los 3 minutos. Pero después de ese arranque, el Rojinegro aceleró con la presión a la bola, la determinación en todos sus elementos y una furiosa puntería (4/9 en triples) para clavar un parcial 16-4, que le permitió escaparse 21-8, a falta de 2:30 minutos. Lanús recompuso su línea y salió del aturdimiento, con un buen ingreso de Paciotti (5) y el goleo de Chaine (8) para cerrar abajo 25-17. El local disfrutó de una producción repartida entre Madera (7), Bernasconi (6) y Ledesma (6).

En el segundo capítulo se modificó la dinámica, con un mayor protagonismo de la concentración defensiva, que se tradujo en un goleo más magro. El Granate apostó por la rotación del banco, que derivó en un mayor control del oponente, aunque no pudo usufructuar del todo en ofensiva. El tanteador se movió apenas 30-23, a los 5 minutos, mientras que el visitante padeció la tercera falta de Jerez Pilotti. El trámite se mantuvo trabado, aunque Central Entrerriano logró retirarse en ganancia 39-26 por la mira calibrada desde Saturno (3/8). Caso contrario para el equipo de Vallet, que lanzó 1/9 en triples.

Tras las charlas en vestuarios, el elenco de Entre Ríos produjo un huracán letal con un pasaje 13-2, en 3 minutos, con una consecución de bombas lejanas. Con ese lapso, el anfitrión se despegó 51-28, con la rentabilidad de los rebotes ofensivos (6) y generación de pérdidas (5) al oponente. El Granate se hundió en el desconcierto, las rotaciones en defensa llegaron tarde y no encontró variantes para cortar la fluidez del rival. Bernasconi (9) continuó encendido en un goleo repartido de Central Entrerriano. El segmento finalizó con los locales arriba 65-47.

En el último episodio, el Grana intentó con variables en defensa, que incluyeron presión a campo extendido y zona, pero el dueño de casa no aminoró su funcionamiento excelso. Las bombas siguieron engordando a Central (5/7) para profundizar la renta, hasta tocar picos de 85-59, con 3:30 minutos en el reloj. El visitante sufrió su anemia en tercera dimensión (1/7) y nunca consiguió cambiar la tónica del juego. Forastieri (8) guió a Central Entrerriano con su manejo de los tiempos y una efectividad pasmosa en ataque. Por eso, la chicharra final sonó para el festejo 91-70 del Rojinegro, que se puso match point y quedó a un triunfo de abrazar la gloria del ascenso.

Planilla oficial del juego

Síntesis:

Central Entrerriano 91: Fernández 6, Forastieri 12, Madera 18, Córdoba 12, Bernasconi 21 (Fi); Capponi 9, Ledesma 8, Ludueña 7, Caire 0, Borrajo 0. DT: Mariano Panizza.

Lanús 70: Jerez Pilotti 0, Funes 8, Ibáñez Paz 4, Trímboli 2, Chaine 20 (Fi); Paciotti 10, Franchino 13, Marín Lucero 8, Quercetti 5, Sampaulise 3. DT: Ezequeil Vallet.

Fuente: Prensa Lanús.

Fotos: Tatiana Fantoma.