En un final cerrado, los Lakers se llevaron el cuarto duelo de las Finales ante Miami por 102-96 y se pusieron 3-1, dejando la serie matchpoint, que se puede definir el viernes desde las 22 h. Dato de color: de las 36 veces que una franquicia estableció una distancia de ese margen, sólo perdió una vez (Warriors ante Cleveland en 2016 – vía @ClutchTimeArg)

El partido fue parejo en su totalidad, y la máxima diferencia que se sacaron fue de nueve unidades recién en el 100-91 a favor de los Lakers cuando restaba menos de sesenta segundos de partido.

El quiebre se produjo a falta de poco más de dos minutos, cuando LeBron capturó tres rebotes ofensivos consiguiendo faltas en jugadas consecutivas que le permitieron ganarse los puntos desde la línea de tiros libres y empezar a tomar una luz considerable para lo que venía siendo el desarrollo del juego.

En la ofensiva de Miami, una seguidilla de malas decisiones en el ataque, en parte por buscar el triple antes que un doble seguro, y en parte debido a la intensidad defensiva de los comandados por Vogel, hicieron que esa ventaja que habían sacado los Lakers la puedan mantener por varios segundos, hasta que llegó el triple definitorio de Anthony Davis, que le terminó dando el tercer triunfo a los de Los Ángeles.

La vuelta de Adebayo le sirvió a Miami en la defensa, aunque el cargarse de faltas rápidamente le jugó en contra para poder mantenerse regular en el parquet. Del otro lado, los actores secundarios volvieron a tener un papel muy importante, especialmente Caldwell-Pope, quien anotó 10 de los primeros 20 del partido para su equipo, y otros cinco en el último cuarto cuando las acciones estaban complicadas.

El máximo goleador fue LeBron James con 28 puntos y 12 rebotes, seguido de Davis con 22 unidades. También anotó 22 Jimmy Butler, que también capturó 10 tableros, aunque no fueron suficientes para dar vuelta el resultado, como así tampoco lo fueron los 21 de Tyler Herro.

La serie se puede definir el viernes, desde las 22 h, con transmisión de ESPN.