El Thunder se quedó con un triunfazo para igualar las Finales

Oklahoma City Thunder se repuso de de una diferencia de nueve puntos y terminó venciendo a Indiana Pacers en el juego cuatro disputado en el Gainbridge Fieldhouse por un ajustado 111-104 y de esa manera igualar las Finales en 2.

Fuerte golpe para los Pacers

El conjunto de Rick Carlisle dio la sensación de haber jugado su mejor partido en esta serie. Fue quien puso la tónica desde un principio y dominó al Thunder a lo largo de los tres primeros cuartos. Sin embargo, el desgaste les jugó una mala pasada y entrado el último periodo, una serie de errores (sobre todo de Mathurin) les terminó costando un partido que los dejaba a una victoria de gritar campeón.

Una de las principales complicaciones hacia el final del partido fue la expulsión por faltas de Aaron Nesmith. Situación que obligó a Carlisle a retocar el quinteto en varias ocasiones en los minutos finales. Debido a esto, tuvo que probar con distintos cambios que no terminaron siendo eficientes y en las últimas posesiones, jugadores como Turner, el ya nombrado Mathurin y Toppin no lograron cerral el encuentro.

Pascal Siakam fue quien dio la cara en los Pacers con 20 puntos, 8 rebotes, 5 asistencias y 5 robos (4 de ellos en el primer cuarto). Tyrese Haliburton lo acompañó con 18 y 7 asistencias.

Esta vez la remontada le tocó a Oklahoma

A pesar de haber tenido muchas dificultades a lo largo de este juego cuatro, el Thunder logró reponerse de un partido en el que se lo vio incómodo y con una demostración de carácter logró revertir la situación (la mayor diferencia llegó a ser de nueve puntos) a pesar de la pésima noche que tuvieron desde el perímetro: 3 de 16 con un pobre 18.8 % de efectividad.

Si la remontada fue posible, en gran parte fue gracias a Shai Gilgeous-Alexander. El MVP fue el goleador del encuentro con 35 unidades (14 de ellos en el clutch). Aún así, la figura del partido bien pudo haber sido Jalen Williams, que con sus 27 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias fue quien mantuvo a flote la ofensiva del Thunder a lo largo del encuentro.

Alex caruso volvió a ser una pieza importantísima saliendo desde el banco. El jugador, que a lo largo de la temporada regular jamás llegó a marcar 20 puntos en un partido, alcanzó esta cifra por segunda ocasión en esta serie (lo había logrado en la victoria en el juego dos) y aportó no solo eso, sino también una energía electrizante y 5 robos.