La novela entre Phoenix Suns y Kevin Durant llegó a su fin. La franquicia de Arizona acordó un traspaso con los Houston Rockets y el veterano alero, de 36 años, se convierte en nuevo jugador del conjunto texano, que viene de terminar segundo en la Conferencia Oeste y se posiciona como candidato firme de cara a la próxima temporada.

El precio a pagar por Durant

Para quedarse con una de las máximas estrellas ofensivas de la última década, los Rockets entregaron un paquete importante: Jalen Green, Dillon Brooks, el pick número 10 del próximo Draft y cinco futuras selecciones de segunda ronda.

Con esta operación, Houston sacrifica juventud y profundidad, pero apuesta por la experiencia y el peso de una leyenda que todavía tiene pólvora en la mochila. Durant viene de promediar 26.6 puntos, 6.0 rebotes y 4.7 asistencias en la 2024-25.

El futuro de ambas franquicias

El arribo de Durant transforma por completo la estructura de Houston. Con Alperen Sengun, Fred VanVleet y Amen Thompson como parte del núcleo, y bajo la conducción de Ime Udoka, con quien Durant tiene una buena relación, los Rockets suman un arma letal en ataque y ganan jerarquía para competirle a cualquier equipo del Oeste.

Para Phoenix, en cambio, comienza una nueva etapa. La franquicia opta por rejuvenecer el plantel y recuperar activos luego de una temporada decepcionante, en la que no pudieron lograr la clasificación a los Playoffs.

La reacción en vivo de Kevin Durant

KD se encontraba en una entrevista en la Fanatics Fest de Nueva York al momento que se hizo oficial el traspaso.

FOTO: Sportscenter

NOTA: Eliseo Luque