En el único duelo de la noche de la Liga Nacional, Platense venció a Atenas de Córdoba en el Estadio Ciudad de Vicente López. El Calamar sacó ventajas con su rotación y siendo eficientes en los momentos claves del juego. Con un Woods determinante, se quedaron con la victoria por 86 a 81. Con este resultado, el marrón alcanzó un récord de 7-6 que lo ubica en el noveno lugar. Los cordobeses se mantienen en la penúltima colocación, con un saldo de 4-12, y nueve derrotas consecutivas.

Primer cuarto con mucha intensidad de parte de los dos equipos. Atenas tomó ventaja en el inicio con una buena efectividad desde el perímetro, sumado a las caídas de Juan Cruz Oberto en la pintura. Platense apostó por la velocidad, sabiendo que la rotación corta de la visita terminaría bajando en intensidad.

Con muchas manos anotadoras, movió bien la pelota, tratando siempre de encontrar el último eslabón de la cadena para anotar. Al momento que la efectividad del triple de Atenas bajó, el calamar aprovechó para congestionar la pintura y cerrar todos los caminos al aro. Desde ahí, el ritmo lo impuso el dueño de casa, que se fue al descanso largo ganando 44 a 39.

A la vuelta de los vestuarios, se vio lo mejor de Platense, que logró sacar doble dígito con una ráfaga de triples y el aprovechamiento de los rebotes ofensivos. Woods tomó cada vez más protagonismo en la pintura, aprovechando la ausencia de Sanders y la poca variable en la pintura. Cada vez que Platense pudo atacar con el foráneo sacó ventajas, incluso con varias acciones de 2+1. Sobre el cierre, los cordobeses encontraron un par de puntos que le permitieron acortar la brecha, pero terminó festejando el calamar en su vuelta a casa.

 

Foto: Prensa Platense