Kevin Durant debió retirarse hacia los vestuarios cuando estaba por finalizar el tercer capítulo del quinto juego de la serie que enfrenta a Golden State y a Houston por las semifinales de la Conferencia Oeste, luego de sentir un dolor en su pierna derecha. Todo apuntaba a que era una lesión en el tendón de Aquiles, pero en seguida se confirmó que era una tensión en el gemelo.

Mirá el momento de la mala noticia: