En un nuevo programa de 3×3 Radio hablamos con Leandro Creimer, preparador físico de Unión Florida, para conocer cómo lleva adelante sus tareas en el club, cuales son las realidades de las jugadoras del equipo y del equipo. Él nos contó que, a diferencia de lo que escuchamos en la mayoría de los equipos que militan en la Liga Nacional Masculina, las chicas prefirieron entrenar juntas, respetando los horarios que cumplían fuera de la cuarentena. Además hablamos de que muchas de ellas también tienen que lidiar con estudios, trabajos, familia, y otras responsabilidades.

En cuanto al desempeño profesional, Leandro nos contó sus proyectos personales fuera del club, los planes a mejorar y si le gustaría integrar un plantel profesional masculino en algún momento. También hablamos de la posibilidad de llegar a la Selección Nacional.

Escuchá la nota completa con Leandro Creimer:

«Hubo un profundo cambio, día a día hay que reinventarse en un montón de cosas, estamos en un montón de ámbitos y hay que ir cambiando mucho, de acuerdo a cómo cambiaba la cuarentena. Fue mucho el cambio, sobre todo positivo, pero también duro, pero por suerte nunca se deja de aprender.

La primera semana me subí al techo, no sabía que hacer, a la hora de trabajar estamos acostumbrados a mandar trabajos o planificar de acuerdo a donde están las jugadoras. Hoy estamos todos en la misma, pero en base a eso es cuestión de adaptarse y encontrar la forma de que las cosas se parezcan a lo que hacían lo más posible. Me pasó mucho de no poder dormir, me encontraba a las 2 de la mañana sin sueño. Entreno tarde para quedar fundido y poder descansar.

Lo que estamos haciendo es: los entrenamientos por horario los estamos respetando, en base a eso enviamos distintos estímulos para que ellas vayan aprovechando y a partir de ahí se van acomodando. Lo importante es vernos; les preguntamos cómo preferían entrenar y por como es el club, ellas quisieron entrenar todas juntas. Querían vernos, juntarnos, porque la realidad es que lo psicológico es más importante de abordar que lo físico. Una sesión más o menos no influye tanto, pero verse es mas importante que una sesión de entrenamiento.

El jugador profesional se dedica al básquet y a su familia. Acá las chicas tienen estudio, trabajo, básquet y se desarrollan en muchos más ámbitos en los que uno se puede ir explayando. Sobre la realidad del básquet, no sé si se habla mucho, es como ser un pájaro carpintero en la cabeza, metiendo una idea de la que no se sabe que puede pasar. El tema del objetivo es muy difícil, yo dejé de jugar hace 4 años, si estuviera jugando ahora me querría matar. Hablamos de ellas, de sus familias, de como sostienen la cuarentena. Hay un montón de realidades, armamos un grupo de whatsapp desde u14 hasta la primera, y todas se comunican. Esto nos trae a la tierra, dentro de no poder juntarse, nos conocemos. Están en constante comunicación, igual que pasaba en el club. Es un barrio, todo eso pasa, todo el tiempo.

Este es mi quinto año en el básquet femenino de Unión Florida. Al segundo año se hizo la Liga Nacional como la conocemos hoy, es el máximo exponente de lo que se hizo en competencias femeninas, creo que la principal dificultad es que no hay suficientes jugadoras para hacer planteles largos o armar muchos equipos. Se toma a muchas que habían pensado en el retiro, pero creo que es por una maduración de La Liga que aún no está. Hay chicas que en 4 o 5 años van a poder nutrir la competencia. Me parece que otras de las dificultades es que no hay demasiados equipos tampoco. Creo que la cantidad de jugadoras y la cantidad de equipos que puede haber son los principales problemas que tenemos hoy en día.

Veníamos de no jugar la Liga Femenina, fue un año que nos sirvió para asentar un montón de bases y estar más tranquilos con la organización. Este año nos enteramos de la competencia, cuando salió la idea empezamos a movernos, fue espectacular, con una nueva base de trabajo desde las más chicas a las más grandes, con nuevos profes y nos enteramos de la liga, y quisimos implementar eso en el profesionalismo y cuando íbamos a poner la frutilla en el postre, cerraron el restaurante. Fue algo que chocó en base a un montón de jugadoras, las que tenemos son las que quieren al club. La liga es algo que cuesta en lo organizativo, no nos dedicamos 100% a esto, nos movemos por todos lados, todos. Fue un esfuerzo muy grande y tuvimos que adaptarnos.

Principalmente por algo cultural, los deportes de chicas y de chicos, creo que se está erradicando como sociedad. Creo que fue algo espectacular con los juegos de la juventud, donde se veían a ambos sexos jugando al básquet. Las estrategias que tenga cada club para captar chicas me parece que queda corto, a la hora de decir tengo 50 o 60 pibas de diferentes edades, más allá de los equipos competitivos, además de los espacios en los clubes. Muchas veces se priorizan otras cosas antes que a las chicas.

Las chicas que están compitiendo en inferiores son chicas que están en el club desde premini. La idea de club la tienen muy arraigada, y ahí cuando llegan a la primera ya saben lo que tienen que hacer. No importa que profe o entrenador esté, el sentido de pertenencia se ve en la cancha a la hora de jugar y de trabajar.

Si quiero profesionalizarme mucho más, tiene que ver con asentar mis emprendimientos. Las dos cosas requieren mucho tiempo para hacerlas 100% bien. Hay diferencia en ser preparador físico del femenino y del masculino. Estoy en Unión Florida porque me encanta, y porque me permite llevar adelante mis otros proyectos. Me parece que hoy, ponerme de preparador físico en un masculino haría que eso comience a temblar, haciendo tambalear las bases. Mis emprendimientos hoy son una idea de actividad física con bases saludables, trabajo en lo que tiene que ver con terapias, yo en la preparación física y en esas base sirve para todos. Tengo dos gimnasios, uno en Unión Florida y otro centro deportivo en Villa Ballester. Dos emprendimientos como esos mas un equipo masculino hoy no cuadraría.

Si no estuviesemos en cuarentena este proceso de asentar bases sería más rápido. Yo creo que cualquier profesional que disfruta lo que hace, la Selección Nacional es el punto máximo que se puede alcanzar en el ámbito profesional. La Selección Nacional es un punto excelente para llegar y transitarla, las selecciones son para sumar entre todos, cualquier punto donde pueda ayudar, bienvenido sea.