El Real Madrid conquistó en Tenerife su séptima Supercopa ACB, la tercera de forma consecutiva, y se convierte en el equipo con mejor palmarés del torneo. Los blancos ganaron al Barça, repitiendo el triunfo del año pasado en Madrid, en una igualada e intensa final que desniveló el MVP Campazzo con un último cuarto sublime, en el que anotó 12 de sus 21 puntos (19 de valoración). Abalde (13 puntos) y Deck (11), los otros referentes ofensivos de los madridistas. Título número 20 con Pablo Laso en el banquillo y récord de Llull, que se convierte en el jugador con más minutos disputados en la historia de la competición (466).

El Clásico comenzó marcado por las defensas, sobre todo por la de un Real Madrid que salió sin reservarse nada. Fruto de ello y de una gran concentración atrás mandó en el primer cuarto, aunque con distancias cortas (18-14). Campazzo (5 puntos y 3 asistencias) y Calathes (6) mantuvieron un intenso duelo por el control del juego, pero fue Deck el factor diferencial en este inicio con un enorme trabajo sobre Mirotic. El argentino sumaba 6 puntos y Abalde otros 5. El Barça encontraba en el rebote ofensivo a su mejor aliado.

Partido abierto
La situación cambió a la inversa en el segundo cuarto. El Real Madrid siguió arriba hasta el minuto 16 con el 31-25. El mejor Llull, con 5 puntos seguidos, neutralizaba la primera embestida azulgrana. Pero el Barça se desenvolvió mejor dentro de las imprecisiones del partido. Le acompañó su defensa y un conjunto blanco que no acertaba en ataque. Liderados por Mirotic y Davies, los azulgranas fueron comiéndole el terreno a los madridistas, que acabaron el primer tiempo uno abajo (31-32).

CAMPAZZO SE ALZÓ CON SU SEGUNDO TROFEO DE MVP SEGUIDO DE LA SUPERCOPA.

El paso por vestuarios no cambió la dinámica de igualdad del encuentro. El acierto en el triple del Barça le permitió mínimas rentas durante casi todo el tercer cuarto. Abrines ponía el 42-47 en el minuto 27. Sin embargo, el Real Madrid no desesperó y siguió buscando soluciones. Reajustó su defensa y mejoró en ataque con Campazzo y un gran Abalde. El alero asumió la responsabilidad ofensiva en su segundo encuentro de blanco y los de Laso encadenaron un 6-0 para darle de nuevo la vuelta al marcador al final del tercer cuarto (50-49).

El Madrid saca su ADN de campeón
El cuarto definitivo no arrancó bien para los blancos, que encajaron un 0-7 de parcial en dos minutos (50-56, min. 32). Más allá del resultado, lo que inquietaba era el ritmo de juego más pausado y conveniente para los azulgranas. En ese momento, apareció Campazzo, a la postre MVP, para darle la energía y decisión que necesitaba el Madrid. Los blancos se reactivaron y lograron un 13-2 con 7 puntos seguidos del base argentino. Del 50-56 se pasó al 63-58 a falta de tres minutos. La tensión incrementaba y Jasikevicius y Laso se repartían las técnicas. El Barça igualó el partido a 67 entrado el último minuto.

Campazzo decide el Clásico
Pero Campazzo ya estaba en modo estrella y su equipo arropándole en defensa. Un canastón suyo ponía el 69-67 a 26 segundos. Rudy provocaba la pérdida de Hanga en la siguiente jugada con un robo marca de la casa y entre Campazzo y el alero balear, desde la línea de personal, cerraban una gran victoria por 72-67. Los de Laso arrancan la temporada de forma brillante con el primer título de la temporada.

ESTADÍSTICAS DEL REAL MADRID-BARÇA

Nota: prensa Real Madrid