Sebastián «Sepo» Ginóbili pasó por los micrófonos de UCU Radio para hablar sobre el regreso de Instituto de Córdoba a los entrenamientos en la cancha de fútbol del club. Todo sobre la nueva normalidad por la que están atravesando los equipos de La Liga para llegar a las «burbujas», en esta nota:

«Juntarte de nuevo después de un tiempo y empezar a trabajar, estar en equipo es buenísimo. Veníamos de muchos meses sin nada y veremos si desde el lunes, con los protocolos adecuados, se pueda volver a la cancha de básquet. Al verlos a todos en la cancha, se siente como que el proyecto está en camino. Hay que tener todos los recaudos y ver las reacciones y las caras«. 

«Lo basquetbolistico y lo mental son factores a tener en cuenta. Hay que ver de bajar la ansiedad, será un trabajo de mucha gente no solo del entrenador. Sabemos que no vamos a llegar en un cien por ciento, pero estamos todos iguales. Va a ser una temporada muy compleja en todos los aspectos. Vamos a tener que acostumbrarnos a la nueva normalidad y cambiar nuestros hábitos«.

«Tenemos el equipo armado con 12 jugadores, contando los chicos del club para jugar, lo que no quita si hace falta algún tipo de refuerzo, lo tengamos. Tenemos dos fichas mayores libres, pero la idea es darle la oportunidad de crecimiento a los más jóvenes. La idea es tener este equipo formado y que sea el que compita, pero atentos de qué manera podemos potenciar porque las exigencias del club son altas y las intenciones son las de ganar». 

«El tema de adecuarse a la nueva forma de entrenar es una forma de encontrar la manera de entrenar. Si o si tendremos que tener 14 jugadores y tener un plantel un poco más largo. No solo vamos a pensar en un partido sino en lo que viene, será un poco como adaptarnos al espíritu de juego de la NBA. Durante el desarrollo de al burbuja tendremos que hacer foco en los aspectos sociales. Vamos a tener un grupo de personas conviviendo durante 40 días, por lo cual es fundamental mantener el buen trato y la comodidad«. 

«Por medio de Manu he hablado sobre lo que pasó en la burbuja de la NBA, pero que obviamente el jugador vive algo diferente y nosotros los entrenadores tenemos que enfocarnos en eso y no solo en el trabajo. Tenemos que sostener al jugador, para que se sienta cómodo«. 

«Vamos a tener una cierta comodidad por jugar en el Ángel Sandrín, pero no va a haber localía. La ventaja pasa por no movilizarnos, y porque nos sentimos cómodos, pero no creo que el factor localía influya para nada. Una vez que entramos a la burbuja, será lo mismo para todos«. 

«El regreso del básquet depende más del gobierno que de otra cosa, el básquet está volviendo en todo el mundo. Argentina no debería ser la excepción. Yo no he visto a nadie, me mantuvo en Córdoba y hay que ser responsables en el tipo de vida que llevamos». 

 

Fotos: Prensa Instituto