La jornada de Liga Nacional se abrió en el Angel Malvicino, donde Unión de Santa Fe mostró su mejor versión y ganó con muchísima autoridad. Los dirigidos por Maxi Seigorman llegaron a sacar ventajas de 20 puntos, para terminar quedándose con el tercer juego de la serie por 88 a 78. Con este resultaron, descontaron en la reclasificación y se pusieron 1 a 2, aún obligados a ganar el sábado si quieren estirar su presencia en la 24/25.
Ya desde el amanecer del encuentro quedó claro que los de Santa Fe no salieron con la misma intensidad de los dos juegos iniciales. Ajustando la defensa y forzando los lanzamientos cercanos al aro, se aseguró poder comenzar a construir sin la necesidad de remar desde atrás. Con muchísimo protagonismo de Whelan y Morrison sacaron una luz de diez unidades en los minutos iniciales. Riachuelo empezó a reencontrarse con su mejor versión en el segundo cuarto, de la mano de un activo Xavi Carreras, que se cargó la ofensiva al hombro.
A la vuelta de los vestuarios Unión encontró puntos en la pintura, aprovechando el juego colectivo y el gran movimiento del balón, entendiendo que el lanzamiento perimetral no estaría de su lado en la noche del jueves (8/34, apenas un 23%). Riachuelo trató de descontar por todas las vías, pero a cada buen momento de los visitantes, llegaba una ráfaga anotadora de los dueños de casa, que llegaron a acariciar los 20 puntos de diferencia. Ya con todo definido, la distancia se disimuló, cuando ya no quedaba demasiado por hacer. Festejo Tatengue, que quiere estirar su presencia en la Liga Nacional.