El árbitro Roberto Smith habló en UCU Radio, sobre la agresión que sufrió por parte de un jugador en un encuentro de Liga Metropolitana entre Crovara e Institución Sarmiento organizado por La Federación de Básquetbol del Área Metropolitana (FeBAMBA).
Frases y audio completo de la entrevista, al final de la nota:
«Empecé a dirigir a los 14 años, este año cumplo 50 años, cumplo 35 años de carrera y nunca había vivido una situación la que me tocó vivir. Los golpes no están solo en el cuerpo, es una situación que no se la deseo a nadie, pero al mismo tiempo todo lo que me sucedió ayer y hoy, me tiene más movilizado, me han pasado cosas que nunca pensé me iban a pasar. La cantidad de mensajes de apoyo que he recibido me llevan a la reflexión de que todos queremos terminar con esto, algo hay que hacer cada uno desde su lugar. Me mandaron mensajes gente que no tenía ni agendada en mi teléfono».
«Un árbitro que tenga soberbia no puede pertenecer a la competencia, como tampoco entrenadores, jugadores y dirigentes. Los jugadores son la parte más importante del deporte, sin ellos no hay deporte, y yo considero que en mi carrera he tenido un trato cordial hacia ellos y esa sensación la vi plasmada en los mensajes que he tenido de jugadores en actividad y ex jugadores y ellos tienen que dar el paso adelante. Hace falta alguien que concretice, tenemos una Generación Dorada que nos ha llenado de mensajes y los jugadores son parte principal».
«A veces se genera entre algunos un falso liderazgo, no solamente de una persona que tiene en sus genes el hambre de ganar, si no de ganar a cualquier precio, y a veces significa lastimar al otro, por suerte son los menos, pero me encontré con uno. Llega un momento donde los jugadores que son los principales actores, entre ellos mismo tendría que ir radiando a los que hacen mal las cosas, que son contados con la mano y esa es la bronca que me da».
«En algún momento no sirve solo las sanciones disciplinarias que se les pueda dar. Yo tuve la suerte de convivir con la Generación Dorada y ellos tenían el ganar entre ceja y ceja, pero con unos valores y de una manera leal y frontal que no creaba duda alguna. Hay pocos jugadores que no entienden que se puede jugar físico y leal y esa violencia no solamente la trasladan dentro de la cancha, que fue mi caso, sino que la trasladan afuera de la cancha».
«Fue un partido parejo, jugado de manera intensa, donde como hecho anecdótico queda que a los cinco minutos del partido por doble falta técnica se tuvo que retirar el base titular de Sarmiento y restando cuatro minutos yo descalifico a esta persona en cuestión (Emiliano Mazzucco), que después me agrede por un insulto. Después de la agresión me enteré que era la misma persona que había tenido inconvenientes con Gabriel Fernández. Yo no lo registré, hoy en día en el club Crovara juegan un montón de jugadores de formativa que yo dirigí. Lo dirigí una sola vez cuando empezó la liga y el otro día. No lo conocía».
«Darío Mariniello, el Presidente del Club Crovara, se solidarizó conmigo. Un club que cambió en 360 grados, Darío está haciendo un trabajo ejemplar. Nos saludó, nos abonaron. Quiero deslindar al club de todo tipo de situación. También lo mismo digo sobre el Presidente de FeBAMBA, Fabián Borro»
«El partido terminó y nos fuimos caminando sin ningún tipo de reproche de nadie, llegamos a la esquina, doblé a la derecha y cuando estoy por entrar al auto vi que una persona venía corriendo, primero no lo identifiqué y después me quedé afuera del auto, para ver que me quería decir, dejas que se descargue y después lo haces entrar en razón y le decís lo que vas a poner en el informe para no engañar ni mentir, porque no hay nada que ocultar, pero ahí se termina, pero así como llegó me pegó una trompada en la cabeza. Traté de defenderme y me volvió a pegar, se metió una persona que intentó detenerlo, pero no pudo y me pidió disculpas, y después los jugadores de Sarmiento y Crovara vinieron, y esta persona se fue diciendo que yo no sabía con quien me metía, que esto no iba a terminar así. Cuando terminó el episodio nos fuimos con mi compañero a hacer la denuncia a la comisaría y cuando llegamos él estaba haciendo una contradenuncia diciendo que en el momento que él se acercó al auto a pedirme explicaciones en forma tranquila, yo lo empujé y lo agredí».
«A Mazzucco lo descalifiqué faltando 4 minutos para terminar el partido, porque él viene a reclamar algo usando términos inapropiados, diciendo que somos dos escupidos, dos tarados y que le hiciera sexo oral, con otros términos, por eso lo expulso. En el partido está filmado y en ningún momento yo le dirijo la palabra. Me dijo que tiene mucha plata, que yo soy un muerto de hambre, que va a pagar la multa y en dos fechas va a volver a jugar. Le indiqué que se retire y en algún momento alguien nos informó que estaba mirando, cosa que no podía hacer. Eso sucedió durante el juego. Quiero que quede en lo judicial, pero tenemos que hacer algo desde el lugar que a cada uno le corresponde para evitar la violencia. Todos tenemos un grado de responsabilidad, empezando por nosotros, pero tenemos que bajar un cambio».
«Mi legajo está en la Federación de Capital Federal desde hace 35 años, yo autorizo para que se abra y lo puedan ver públicamente, ahí se ve cuantos informes hice en mi carrera y cuantos fueron por problemas con jugadores o simpatizante conmigo y pido hagan lo mismo con esta persona. Yo no puedo decir más nada, todo va a ser subjetivo».
«La gente puede saber que no soy el mejor árbitro, pero siempre he tratado a todo el mundo con respeto. Es seguro que me equivoco, pero aseguro que si tengo un mal día nunca lo traslado a la cancha. Si me equivocado técnicamente, lo he reconocido».
«Me tengo que hacer estudios, los golpes fueron de puños en la cabeza, no estoy cortado ni tengo hematomas. No tengo una lesión visible. Tengo dolor de cabeza, me mandaron a hacer estudios y tomografía. A veces es preferible los dolores físicos que los golpes de adentro».
«Espero no se normalicen los hechos de violencia, me tocó con un jugador, algo que nunca hubiera esperado, mi carisma, mi respeto y admiración para todos los jugadores. Desde el más conocido hasta el que en poco tiempo, ojalá, tenga la suerte de hacerse conocer».
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