Tras los rumores de una posible salida al básquet uruguayo para disputar el torneo Metro, en 3×3 Radio hablamos con Leonardo Mainoldi sobre su presente y este nuevo proyecto en el país vecino. El nacido en Cañada de Gómez explicó que su contrato con Quimsa ya está finalizado (al darse por concluida la edición 19/20 de la Liga Nacional) y que es un jugador libre para afrontar este desafío. En cuanto a los planes a futuro, comentó que le gustaría quedarse en el equipo, ya que ésta fue una de las mejores temporadas.

El ex San Martín de Corrientes también habló de su paso por las distintas categorías en España, lugar al que emigró con solo 17 años, y donde pasó más de trece años de carrera. En nuestro país, fue campeón de Super 4 (con Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia), Súper 20 (con San Martín) y Liga Nacional con Quimsa. También recordamos sus pasos por la Selección Argentina y las ganas de volver a vestir la camiseta celeste y blanca.

Reviví la nota completa con Leonardo Mainoldi:

«No quise ir a Cañada, porque voy a querer ver a mis padres, que son pacientes de riesgo, así que decidí quedarme en Santiago, que ha manejado esto muy bien. Estoy aprendiendo a vivir con esta situación, disfrutando el tiempo con mi familia, que no podemos hacerlo durante la temporada.

Este año me sentí muy bien con la espalda, que fue mi único problema, estar en casa, sin poder moverte o hacer los ejercicios que corresponde, la mala postura, no es lo aconsejable, eso si que si uno no lo tiene en cuenta, puede ser malo. Cuando me pongo en movimiento me siento bien. Los primeros días estuve como loco, el día a día era molesto y doloroso, hoy estoy bien y lo necesito, cada uno tiene su rutina, y cada uno lo lleva a su manera. No puedo estar parado, y una de las cosas que se dijo, era la posibilidad de jugar cuanto antes en Uruguay. Una de las posibilidades de tomar esa oferta es no estar parado.

Había un interés en determinado momento, pero estaba con contrato y en plena competencia y no pasó más de ese interés. Ahora está claro que es la metro, que están probando la situación. Hoy en América del Sur no hay competencias que inicie, Uruguay tiene mas o menos controlado el tema, van a ver si pueden jugar el metro y ver si pueden hacer la liga. Si está la posibilidad es para seguir en ritmo, hace 3 meses que no estamos jugando, no es lo mismo que el entrenamiento de básquet.

Si tal cual, uno está acostumbrado a la competencia, al desafío y lo tomo de esa manera. Estoy esperando que se pueda concretar. Espero que en estos días se de. Uno a lo mejor en el día a día hoy tiene mucha incertidumbre de hasta cuando. Con el cierre de la liga estaba la esperanza, cuando te confirman que no va a jugarse, duele, molesta, y a lo mejor se haría más llevadera si nos pudieran decir cuando volvemos. Hoy por hoy, si le pregunto a cualquiera cuando vuelve la pretemporada, nadie te puede decir una fecha.

Hoy por hoy mi contrato con Quimsa ya se terminó, soy un jugador libre y no dependo de la decisión de un club para ir a Uruguay. Prefiero entrenar y ponerme a punto compitiendo.

Estoy muy bien acá, Santiago es muy lindo, tenemos un gran trato para mi y mi familia, están cómodos. Si, por qué no, ahora depende un poco del club, pero bueno, por mi parte está la idea y las ganas de quedarme en Quimsa.

Mi ida a España fue una experiencia increíble, también fue un desafío. No es fácil a los 17 años dejar tu casa, tu familia, la comodidad, los amigos e ir a una aventura y hoy por hoy con el diario del lunes fue la mejor decisión de mi vida. Era toda una incertidumbre. Era ir a estar solo, mi papá me acompañó una semana y de ahí hice todo por mi cuenta, en todos lados me trataron muy bien. Son momentos duros, que uno siempre se queda con lo lindo, pero cuando se apaga la luz pensás que estás haciendo tan lejos de casa. Gracias a dios no me dieron el brazo a torcer y pude aguantar.

Yo creo que antes más todavía, cuando tuve la posibilidad de estar en las selecciones o preselecciones, uno siempre trata que el equipo tenga el mejor rendimiento posible, pero siempre como equipo, en ese momento hay más responsabilidades. Nunca fue mi fuerte ser un goleador o sobresalir en estadísticas individuales, sino tratar de que el equipo funcione de la mejor manera, y hacer que juegue como lo quiere el entrenador.

Uno quiere una chance más, por más que le pasen los años, es una cosquilla que no se pasa. Uno que visitó la camiseta de la selección y sentir lo que es nunca va a decir que no está, ya después lo dirá el entrenador, pero siempre que me digan que vaya a doblar la ropa, voy. Lo que sea con tal de estar con la selección. Ponerte la camiseta, escuchar el himno en la previa. Tuve la suerte de compartir equipos con jugadores que uno veía por televisión, es algo que no me lo va a quitar nadie. Decirlo con palabras a lo mejor te hace parecer que es algo lindo, pero realmente es algo único. Los videos de la presentación en Río, con todos los jugadores cantando y gritando, era algo increíble, no tengo otro adjetivo, era un viaje de egresados. Habían conseguido zapatillas blancas y volvieron imposibles de usar. Los torneos clasificatorios, como México o Venezuela fueron increíbles, que nos dieron un lugar en Río o España, muchos no le dan la importancia, pero hay algo previo donde clasificar y no es fácil.

Obvio, más como está el país hoy, preocupa el después, qué hacer, como va a ser la vida. Hoy hemos tenido un pequeño aviso, de no tener ciertos viajes, ciertos entrenamientos. No recuerdo hace cuanto no estaba tres meses en casa. Se verá lo que pasa. No pienso en el retiro porque me siento bien, tengo muchas ganas. Cuando sea una obligación y me cueste, sea pesado, voy a ser el primero que diga «Hasta acá», no vale la pena seguir forzando algo que no da. Esta temporada no se ganó nada, teníamos todo y quedó ahí y no pudimos coronar, y fue uno de mis mejores años en el día a día, de las ganas de entrenar, fui a muchos entrenamientos voluntarios. Hacía mucho que no disfrutaba tanto una temporada. Estoy extrañando muchísimo