Una noche que no arrancó nada bien, terminó siendo soñada para Uruguay, que venció a Panamá y comenzó con el pie derecho el camino hacia el Mundial de China 2019.

Es que el nerviosismo jugó su papel en el plantel celeste que volvió a reencontrarse con el público local en el Palacio Peñarol, aunque para algunos era la primera vez.

Fue así que Panamá sacó diferencias en el primer cuarto, lastimó en el uno contra uno, se hizo fuerte en defensa y complicó la estructura de un equipo uruguayo que no encontraba los caminos al gol.

La visita llegó a estar nueve puntos arriba (22-13) y terminó cerrando el primer período 24-17, ventaja que en el segundo cuarto estiró rápidamente con dos triples y llegó a tener 15 de renta (39-19).

Pero de a poco y basado en la defensa, el equipo uruguayo comenzó a cambiar la historia y primero se fue al descanso largo cinco abajo: 46-41.

Y en el tercer cuarto, La Celeste sacó a relucir todas sus armas. Gustavo Barrera y Esteban Batista lideraron la reacción y a ellos se sumaron Santiago Vidal, Luciano Parodi, Juan Ducasse y Mathías Calfani. La rotación comenzaba a dar frutos y a falta de 3’38” Uruguay lo empató en 57 para después pasar por arriba a un Panamá que sintió el cansancio y ser visitante.

Con un parcial de 31-12, el equipo de Marcelo Signorelli se fue 14 arriba en el final del tercer cuarto (72-58) y en el inicio del último período llegó a tener 19 de renta (80-61) para encaminarse a la victoria.

El mal comienzo defensivo quedó atrás al igual que el nerviosismo por jugar en casa nada menos que una Eliminatoria mundialista y el equipo celeste le hizo frente a las bajas del capitán Bruno Fitipaldo y Jayson Granger, demostrando que hay nivel en el plantel al ganar un partido clave.

La gente acompañó y el equipo respondió. Uruguay consiguió un triunfo para soñar con volver a un Mundial. El camino es largo y recién empieza, pero La Celeste lo inició con una sonrisa.

Planilla oficial del juego

Nota: diario El País de Uruguay
Foto: FIBA