Bruno Lábaque, que se sumará al cuerpo técnico de Atenas para lo que resta de la Liga Nacional, habló en UCU Radio para contar todo sobre este nuevo desafío y lo que se viene en La Liga.
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«Yo sé lo que me voy a jugar. Yo no soy entrenador, Claudio Arrigoni sabe que la autoridad es completamente de él, que siempre va a tener la última palabra con respecto al equipo. En una reunión familiar mi papá (Felipe Lábaque) me dijo que me lo pedía como padre y no como directivo. Claudio también me lo había pedido y dada la situación del club, si creen que puedo dar una mano me voy a meter. Todos los desafíos sirven en la vida».

«Mi carrera siempre estuvo llena de desafíos, salí campeón después de la partida de Marcelo Milanesio cuando todos decían que Atenas iba a desaparecer. Hace unos meses que había comunicado que me quería ir del club. Hay muchas personas que hablan, que critican, pero nunca los veo por el club intentando o proponiendo algo. Yo me puedo equivocar, pero hago, estoy. Voy a ayudar hasta el último día que esté en el club«.

«Me gustaría que el esfuerzo que hicieron los dirigente ahora trayendo tres extranjeros, hubiera sido al principio. Uno plantea eso a los directivos y pide, pero muchas veces por la postura de Atenas de no hacer nada que no puedan cumplir y estar al día con los jugadores, pero lo mejor es tener el equipo conformado de entrada. Uno pone la cara, pero lo reniego y sufro. Se mezcla el sentimiento por el club, lo que le pasa a mi papá como padre y no como directivo. A veces llego al club y los veo llorando».

«Claudio está haciendo su primera experiencia en el club. Yo me sumo porque confío en los jugadores y tenemos un pacto con los jugadores. Trato de sumar a lo que me pide Claudio después de 25 años ligado y jugando al básquet«.

«La próxima Liga si Atenas se salva, mi postura de contratar un técnico de primer nivel y que él arme el equipo, más cuando ya se pagó todo lo de las mejoras del estadio».

Foto: Atenas