Tras varios años de fracaso tras fracaso para Los Angeles Lakers, la franquicia decidió que para la temporada 19/20, además de hacer un esfuerzo para firmar a uno de los internos más dominantes de la liga como lo es Anthony Davis, también habría cambios en la banca y es por esto que llegó Frank Vogel, quien se encontraba sin equipo tras haber sido despedido por Orlando en 2018.

Parecía una apuesta fuerte, sobre todo desde el punto de vista de su experiencia, ya que pese a haber dirigido a uno de los mejores Pacers entre 2010 y 2016 (alcanzó las finales del Este en 2013 y 2014) su paso por los Magic había sido malo y sin siquiera alcanzar las 30 victorias en ambas temporadas. Sin embargo, la misión estaba clara y era recuperar la identidad Laker con un equipo que intentaba levantar el nivel de varios jugadores que no atravesaban su mejor momento.

De arranque las franquicias de Los Angeles dominaron la escena del Oeste y, pese a que los Clippers se presentaban como la mayor preocupación de cara a la postemporada, finalmente los Lakers se quedaron con el primer lugar de su conferencia en una temporada marcada a fuego por la suspensión en marzo y la reanudación a fines de julio. En playoffs la tendencia se mantuvo y, de hecho, el equipo entrenado por Vogel se quedó con las tres primeras series por el mismo resultado (4-1) para enfrentar en las Finales a Miami.

Sin embargo, haciendo un breve repaso de la rica historia de la franquicia más ganadora del Oeste, pocos entrenadores tuvieron la capacidad de llevar al equipo a las finales en su primer año al mando y, mucho menos, quedarse con el título. De hecho, de los 26 coachs que dirigieron a los Lakers a lo largo de más de 70 años, solo cinco se consagraron en su debut y Vogel puede anotarse en esa lista si vence al Heat en esta serie.

El primero fue justamente el primer entrenador que pasó por el banquillo Laker: John Kundla. Fue el responsable del equipo tanto en la BAA en la 1948/49 como cuando la liga pasó a ser NBA para el curso siguiente, y en ambos casos Kundla fue campeón, pero para este artículo el que cuenta es el de la temporada 1949/50, el debut de la NBA.

Tras más de 20 años y cinco títulos obtenidos, todos por parte de Kundla, le llegó el turno a Bill Sharman de anotarse en esta nómina. El equipo ya estaba radicado en Los Angeles luego de haber sido fundado en Minneapolis y venía de varias temporadas en las que llegaba a las finales pero caía en esa instancia, muchas a manos de los Celtics. Sin embargo, Sharman le cambió la cara al equipo con su llegada y, en su debut, derrotó a los Knicks en el cierre de la 1971/72.

Poco tiempo, y solo Jerry West, tuvo que pasar en el medio antes de que llegue el tercer entrenador que levantó el trofeo en su primer año: el legendario Paul Westhead. Había sido asistente de West el año anterior, pero el «hombre logo» fue removido de su cargo antes de iniciar la temporada 1979/80 y su lugar lo ocupó Jack McKinney, asistente de los Blazers. De todas maneras no estuvo mucho tiempo y a mitad de temporada fue removido, por lo que se ocupó de tomar el mando Westhead por el resto del curso en un equipo comandado por el rookie que haría historia en las finales de ese año: Magic Johnson.

Algo similar sucedió unos años después, durante la temporada 1981/82. Esta vez era Westhead el entrenador que fue removido de su cargo a mitad de camino y su lugar fue ocupado por un tal Pat Riley, el padre del «Showtime». Se hizo cargo del equipo cuando solo habían disputado 11 encuentros y llevó a la franquicia a una nueva consagración, la octava en su historia, frente a los Philadelphia 76ers.

Tras la gran década de los ’80 en la que Lakers y Celtics protagonizaron batallas épicas, el equipo no fue el mismo durante los ’90 y pasó a ser un habitué de playoffs pero no de finales. Sin embargo, eso cambió para los inicios del siglo XXI con la llegada del hombre que le había dado a los Bulls sus seis títulos desde la banca: Phil Jackson. Fue contratado para dominar a la dupla conformada por Shaq y Kobe, dos jóvenes con un potencial inimaginable. Su primer año en LA fue el mejor en cuanto a temporada regular (récord de 67-15) al mando de la franquicia angelina y en postemporada no le dieron chances a sus rivales, venciendo a los Pacers en las finales por 4-2.

Su salida al final de la temporada 2010/11 dio lugar a una de las peores rachas en la historia de la franquicia, en la que estuvieron seis años mirando los playoffs desde afuera hasta 2020. Además, cinco entrenadores ocuparon ese puesto en un período de ocho años y no parecía haber luz al final de tunel. Sin embargo, la llegada de LeBron en 2018 sumado a Davis esta temporada lograron revertir esa tendencia.

Pero también gran parte de este presente es mérito de Frank Vogel. El entrenador se hizo cargo de un equipo que históricamente hizo un buen papel en cada temporada y que, increíblemente, no lograba hacer pie desde 2011 hasta su llegada. Con él en el banco, todo eso cambió y esta vez, tras 10 años sin llegar a las finales, están ante la gran oportunidad de alcanzar un nuevo título para sus vitrinas, el número 17.

Nota: Emiliano Iriondo | Twitter: @emi_iriondo