Tras años y años en los que el deporte de la naranja corrió de atrás en los intereses económicos de la marca de la pipa, finalmente diferentes aspectos globales convergieron para que se posicionara por primera vez en la historia por delante de la número cinco en cuanto a ventas anuales.

En el último curso, todos los productos de indumentaria y calzado de básquet alcanzaron la impresionante cifra de 1692 millones de dólares en ventas, superando por diez millones al fútbol, que en los últimos años había registrado caídas sin precedente. Por el contrario, el juego creado por Naismith está en pleno crecimiento, algo que se le atribuye al acuerdo firmado con la NBA para vestir a las 30 franquicias junto a una gran variedad de conjuntos para cada equipo (las City edition, Statement, Earned y demás).

Esa cifra que supera por primera vez al fútbol también representa un aumento del 22,7% respecto a los números alcanzados en 2017, cuando se realizó precisamente el acuerdo con la liga norteamericana y, a partir de ahí, no detuvo su crecimiento. En comparación, en ese mismo período de cinco años el fútbol decayó un 21,5%, atribuyéndole esa caída a los años en los que la Champions League la ganó un equipo que no vestía Nike (2017 el Real Madrid con Adidas y 2019 el Liverpool con New Balance), pero con leves mejorías en 2016 y 2018, años de Eurocopa (campeón Portugal con Cristian Ronaldo, su cara más importante) y Mundial (campeón Francia y subcampeón Croacia, dos de los equipos vestidos por la pipa) en los que superó ampliamente los dos mil millones de dólares.

Otro aspecto que diferencia el negocio del básquet respecto al del fútbol en Nike es que desarrolló hace décadas la submarca «Jordan Brand», que le permitió llegar a más público con la imagen del basquetbolista más importante de todos los tiempos (que hasta viste al PSG). De esa manera, equipos de NCAA y selecciones FIBA (como Argentina), optaron por llevar la figura del seis veces campeón de la liga para afianzar aún más su relación con la empresa.

Por si fuera poco capitalizar la indumentaria de todos los equipos, también se sitúan como la empresa que más jugadores de élite calza, como su principal figura LeBron James, pero también con quienes vienen detrás de él en busca del trono: Kevin Durant, Giannis Antetokounmpo, Kyrie Irving y Paul George, entre muchos otros. En lo que respecta a la marca Jordan, que apunta a los jóvenes sobresalientes, ya tiene en su carpeta a Luka Doncic, Jayson Tatum y Zion Williamson (con quien hubo un extraño episodio cuando jugaba en la NCAA en el que se rompió una de sus zapatillas apenas iniciado el partido).